miércoles, 6 de agosto de 2008

-La sonata de las lágrimas-


Sonaba un piano en la oscuridad; caían las lágrimas de Harmuna al suelo encharcado al mismo ritmo que alguien desconocido tocaba las teclas de su elegante piano. Caía la lluvia de sus ojos, y el llanto no cesaba, al contrario; se incrementaba cada vez mas para que el pulso de Harmuna se acelerara por momentos.
Sentía la joven como se asfixiaba, como se desidratada por segundos al parecer su llanto torrencial de aguas incesantes y como sus ojos se volvían escarlatas por el dolor de su compungido corazón. Mas de repente la música llegó a sus oídos y comprendió que alguien, algo estaba tocando al ritmo de la caída de sus lágrimas, mientras se preguntaba a si misma "¿Lloro porque recuerdo la melodía? ¿Lloro porque aquel que toca el piano no escucha mi llanto?"

-Sonata...-pronuncio Harmuna entre susurros y la música paró de golpe, dejando colgada mas de cuatro notas.

Quizás todo cesara por lo dicho por la joven de capucha roja, o puede que simplemente fuera pura coincidencia. Aun así es el rojo se movía entre la noche y al llegar a la cuna del bebe, este lo tomo en brazos besando los finos cabellos dorados que sobresalen de las sabanas de nácar.

-Te pido que me perdones Ilbraya...No había escuchado tu llanto.